Colonia del Sacramento es una escapada ideal para disfrutar los fines de semana, y para quienes quieren experimentar unas vacaciones diferentes.
Fundada en el año 1680, conserva el aspecto de una típica ciudad portuguesa, con sus calles de adoquines y las veredas angostas que huelen a jazmines frescos. Esta particular arquitectura que mezcla estilos del siglo XVII le permitió ser declarada Patrimonio Histórico de la Humanidad en 1995.
No se puede dejar de hacer el tradicional paseo por el Casco Histórico y degustar las delicias gastronómicas en los bares y restaurantes que se ubican a lo largo de estas callecitas coloniales. Se puede disfrutar de variedades de quesos y dulces de la zona, del tradicional chivito uruguayo y tambien realizar una degustación del aceite de oliva extra virgen, que se elabora en la zona.
Dentro del Casco Histórico hay que conocer:
- La Calle de los Suspiros: construida en piedras de cuña, permite observar a lo largo de su recorrido construcciones de la primera mitad del siglo XVIII.
- El Faro: edificado sobre las ruinas del convento de San Francisco e inaugurado en 1857.
- La Plaza de Toros del Real de San Carlos: con un estilo morisco, inaugurada en 1910.
- Las Ruinas de la Capilla y del Convento de San Francisco: es uno de los monumentos más antiguos construidos entre 1683 y 1704.
En la zona de Colonia se puede disfrutar del turismo rural, alejándose un poco del centro para visitar clásicos establecimientos rurales o estancias y realizar caminatas por bosques, cabalgatas, y hasta alojarse en cascos rurales.
Colonia es una ciudad que crecio mirando al río, que tiene grandes playas, donde se puede disfrutar de la tranquilidad y lindisimos atardeceres.
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