Las calles de Durazno vieron transitar en la década de 1960 a un perro que pasó a ser adoptado como propio por todos los duraznenses, porque conocían su admirable historia de lealtad a su amo, a quien siguió hasta la tumba.
Esta antigua plaza, que hasta 1911 se denominó “Progreso”, logra combinar con su bella estructura, las condiciones de ser un importante lugar de tránsito con la calidez de una plaza de barrio.
Durazno, ubicado en el corazón del país, es una ciudad que ofrece múltiples atractivos turísticos.
Además de su rica historia, esta ciudad cuenta con bellezas naturales que invitan a recorrerla y a disfrutar de la calidez de su gente.
Entre los principales atractivos de Durazno se encuentra el Parque de la Hispani...